El alcalde Galán destacó que, desde las elecciones de julio pasado, más de 1.700 personas fueron privadas de su libertad por motivos políticos en Venezuela, sin contar a aquellos que se vieron obligados a abandonar el país debido a la persecución política.
En los últimos meses, alrededor de 400 perseguidos políticos llegaron a Bogotá, lo que planteó nuevos desafíos para la ciudad en términos de integración y apoyo a esta población vulnerable.
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La senadora Paloma Valencia (Centro Democrático) se unió a las protestas este jueves, expresando su apoyo a la comunidad venezolana y al presidente electo, Edmundo González.
Mientras tanto, el exvicepresidente Francisco Santos lideró una manifestación frente a la sede de la Cancillería, exigiendo que Colombia no enviara una delegación diplomática a la ceremonia en la que Maduro quiere mantenerse en el poder, de manera ilegal, en el Palacio de Miraflores, en Caracas.
Galán concluyó su intervención subrayando la necesidad de garantizar el respeto por la voluntad popular en Venezuela y de abordar la llegada de los perseguidos políticos a Bogotá.
Hizo un llamado al presidente electo de Venezuela, Edmundo González, para que visitara la capital colombiana y acompañara a los venezolanos que han hecho de Bogotá su hogar, reafirmando su compromiso de no guardar silencio y de no dejarlos solos en su lucha por los derechos humanos y la democracia.
