No hay nada más peligroso que anticiparse demasiado y dar las cosas por sentado. Al comienzo de esta semana en el beisbol venezolano, en la que se completaría la primera mitad del Round Robin, parecía haber dos cosas muy claras, la superioridad de Cardenales y la debacle de Magallanes a merced de un pitcheo desastroso. Ese escenario parecía dejar a Bravos y Águilas en una lucha aparte por el segundo boleto a la Gran Final. Pero todo eso cambió.
Dos jornadas bastaron para que insulares y rapaces se acercaran a un juego del líder y Magallanes entrara en la carrera, combinando una sólida producción ofensiva con un hermético relevo, mucho más parecido al mostrado en la ronda regular, cuando dejó efectividad de 4.91, la tercera mejor del torneo. Ahora mismo pareciera que la única certeza es que Tigres está fuera de la carrera, lo que lo vuelve aún más peligroso, esa piedrita en el zapato que podría complicar demás el andar del resto.
Si, Cardenales sigue teniendo la mejor ofensiva de esta instancia con un promedio colectivo de .319 y una sólida cantidad de extrabases (26). Y si, en ese apartado supera ampliamente a sus perseguidores más cercanos. Pero no tanto a Magallanes, cuyos bates ligan para .306 y suman nueve bambinazos, 11 dobles y hasta un triple, una ofensiva que había quedado en segundo plano debido a la mala actuación del bullpen, pero que ahora luce realmente peligrosa.
¿Por qué?, porque los brazos eléctricos pudieron reajustarse, ganaron confianza con un blanqueo a Tigres y demostraron pericia para mantener a raya al peligroso Cardenales. Asimismo, recuperaron al cerrador Wilking Rodríguez, que se había lastimado a mediados de diciembre, pero ya está listo para sumar a la causa eléctrica, y se han reencontrado con la mejor versión de Anthony Vizcaya y el exgrandeliga Felipe Rivero. Eso sí, deben hilar fino para poder superar a quienes tienen por delante porque nadie quiere quedarse fuera de la final.
Bravos, pese a tener una discreta ofensiva, presume el segundo mejor pitcheo de esta instancia con una efectividad de 3.04 y pareciera que le favorece un poco el calendario que los espera en la segunda mitad del Round Robin. Los de José Moreno chocarán hasta cuatro veces con Tigres, que por ahora es el más débil, pero además verán a Magallanes chocar también cuatro veces con Águilas y ahí podrían definirse muchas cosas.
Los rapaces tienen a favor el pitcheo más efectivo de la postemporada con apenas 16 carreras limpias permitidas para una efectividad de 2.03. Pero han sufrido muchos problemas defensivos en las primeras de cambio y eso, si no se resuelve, podría salirles muy caro.
En este punto, cualquier pronóstico es osado. Pero hay algo que es seguro y es que la segunda mitad del Round Robin está imperdible.
